sábado, 16 de octubre de 2010

LEGIÓN DE MARÍA Y LOS JOVENES



Dios confió en los jóvenes. Se fió de la joven María al pedirla ser su Madre. Y no fue defraudado. Encontró en Ella un alma receptiva generosa que, áún sabiendo las consecuencias que su sí tendría, dijo "hágase".


Jóvenes que fueron llamados a seguir a Jesucristo cuando éste comenzó a predicar, y entre ellos el más joven de todos, San Juan que no le abandonó en los durísimos momentos de su pasión. En estos jóvenes el Señor confió la gran obra de que todo el mundo supiese el amor de Dios manifestado en Jesús, también hombre joven.


Somos, pues, herederos de jóvenes zarandeados por ser amigos del Amigo, que se fiaron de Dios y pusieron lo que ellos tenían para que el plan de Dios se realizara.


Si siempre los jóvenes han de ser una preocupación para Legión de María, a la vista del mes de agosto en el que se va a acelebrar la JMJ 2011 en Madrid, ha de ser una prioridad. Hemos de buscar a los jóvenes para que descubran la belleza de Jesucristo y se encandilen de Él. En todos nuestros trabajos semanales hemos de tenerlos presente. Buscarlos especialmente en los contactos callejeros, ya sean del mismo grupo o de los contanctos interparroquiales. Buscarlos cuando visitemos a los auxiliares preguntándoles por hijos, sobrinos y nietos para que esos legionarios hagan apostolado con los más jóvenes de sus casas. Acercarnos a los más jóvenes en los hospitales o hablar de ellos con los mayores que trabajamos. Y no digamos si damos catequesis en las parroquias, haciéndolo con mayor cordialidad y paciencia...


El Señor quiere hacerse el encontradizo una vez más con los más jóvenes utilizándonos como un instrumento activo. Desea utilizar nuestras manos, pies y boca, para hablarles de nuevo al corazón y volverles a repetir su mensaje nuevo, aunque ellos estén mal informados pensando que es del pasado. No les tengamos miedo, no nos veamos incapaces de hacerlo por nuestra edad ya madura. En su casa, quizá, no han escuchado lo que tu les puedas decir. Y si lo han hecho, por haberlo hecho su padre o madre no lo han dado su importancia. Pero que se lo digas tu...que les enseñes que solo Jesucristo, el eterno joven, tiene palabras de vida eterna, que sólo Él da sentido a sus vidas, a su presente y futuro, que este Jesucristo sigue vivo palpitando en su Iglesia; que la joven María fue una valiente y que dependió todo de Ella... Buscad a los jóvenes, ilusionaos con esta labor que la Iglesia ha puesto en nuestras manos, no sigamos por inercia nuestros apostolados rutinarios. Para hacerse en encontradizo con ellos o tener éxito no hace falta tener 23 años , ser rubio ojos azules o con barba de tres días. Hace falta un soñador que esté ilusionado por Jesucristo, que tiene experiencia de Él, y que se acerca a los jóvenes llevando este tesoro en vasijas de barro.


No hablo de hacer un grupo de jovenes de Legión, aunque si sale mejor que mejor. Hablo de trabajar con los jóvenes, llevarlos a Jesucristo, ilusionarlos ante la JMJ del próximo agosto en Madrid. Cuántos esperan oir hablar del Señor y no hay nadie que lo haga, estando anestesiados por el consumismo u otros antivalores.


Que la Virgen Madre de los jóvenes nos mueva el corazón a intensificar nuestras actividades con ellos, Ella la joven eterna, la del siempre SI.
Allocutio del mes de octubre en el Comitium "Nuestra Señora del Sagrario"
de Toledo

1 comentario:

Unknown dijo...

Humildad y Certeza. Saludando a nuestros jovenes como Cristo envolviendoles con el mensaje de Dios Amor y Misericordia, amigo fiel ,luz en nuestro camino .