sábado, 16 de agosto de 2008

¿IGLESIA ENVEJECIDA?



Ayer tuve la inmenso privilegio de poder concelebrar en la Catedral Primada en el día de la Virgen del Sagrario que tanto nos dice a los toledanos. Además del cabildo algunos sacerdotes naturales de la ciudad estuvimos allí. La emoción se me hizo presente durante la Misa y la procesión de la Virgen por las naves catedralicias. Ya está visto que lo que uno ha vivido desde niño te marca totalmente.Creo que más de 4.000 personas estábamos allí.

El Cardenal estuvo interesante, como suele estarlo, abriendo nuevos caminos a la reflexión:


  • "Esa Iglesia, aparentemente o realmente envejecida, puede todavía construir su mañana y el mañana de la humanidad si tiene fe suficiente".

  • "Tal vez la Iglesia pueda parecer vieja o envejecida, puede parecer cargada de años, y formada por personas de años, pero sabe la Iglesia que puede desear la novedad de Dios y de su amor antes de obtenerla. Sabe que puede amar y esperar contra toda esperanza, y más allá de triunfos y de prestigios humanos".

  • ."Esta es su tarea para nuestro tiempo. La fe se propone, no se impone. Nuestra tarea como cristianos no es otra que avivar y alimentar la experiencia de Dios: la fe, propiciar el encuentro con Dios, y anticipar entre nosotros el reino de Dios".

Ciertamente contemplamos que nuestra Iglesia aparece envejecida porque aparece formada por personas cargadas de años, pero sigue llevando en esta vasija de barro el mensaje siempre joven del evangelio de Jesús. La Virgen del Sagrario, la Madre del Amor Hermoso, nos muestra cómo viviendo inmersa en Dios, se permanece en la eterna juventud.

5 comentarios:

Beatriz del Valle Galán dijo...

¿Esto es para pelotear al Cardenal?
¿También es usted de los que desean ser canónigos?
Por cierto, no creo que los seminaristas canten tan mal. No crea que usted lo hace mejor que ellos.
Y dígale al cura de la barba que no mire al reloj cuando celebra la Eucaristía.

Gustavo Adolfo Conde Flores dijo...

Amiga Beatriz:
No se si me tratará en la parroquia pero si algo me caracteriza es mi nula capacidad de peloteo. Ya ve donde estoy y que cargo ocupo.
Sinceramente no está en mis pretensiones ser canónigo, ya que no tengo ni edad aún para serlo, ni méritos suficientes como tienen ellos para serlo. Sobre el canto de los seminaristas es algo opinable totalmente. Recuerdo que en mi tiempo de seminarista con D.Antonio Celada ensayábamos mucho y bien..y así resultaba todo. Aunque me eligieron como solista, como director de capilla musical del seminario,y ensayara con la Schola en la ausencia por enfemedad del maestro Celada, por supuesto tiene ustad más razón que un santo: en el país de los ciegos, el tuerto es el rey, o por si no lo entiende le digo que soy consciente de quén soy y quá cualidades tengo aunque las ponga a disposición y no me corte.
Por cierto el cura de la barba comentó de no qué animal, pues no mira al reloj. Le animamos que esté pendiende de otras cosas para vivir mejor la Misa.

Conchi pddm dijo...

Perdón, pero puedo testificar y testifico que "el barbitas" SÍ MIRA EL RELOJ VARIAS VECES durante la celebración. Es verdad que a mí no me distrae. ¡Como si quiere mirar... "pa" las musarañas! Pero puede dar la sensación de aceleramiento o de no estar a gusto con lo que está haciendo.

En varias ocasiones, a mí se me han transmitido quejas porque "la misa de 11 se alarga demasiado por culpa de los cantos". Sinceramente, me parece penoso que un Domingo no dispongamos ni de 45 ó 50 minutos para una Eucaristía, pero dispongamos de 2 horas para un paseo, un cine o un partido de fútbol... A esas quejas siempre respondo lo mismo: "que comulguen y se vayan, si tanta prisa tienen". También he propuesto que se celebre una misa especial para "prisosos dominicales", de 15 minutos, entre la misa de 11 y la de 12.30. DA TIEMPO DE SOBRA. ¡Pero que dejen a la gente en paz disfrutar de la oración y de los cantos, al menos una vez a la semana! Por otra parte, en el barrio hay una oferta variada de celebraciones. Que cada cuál elija a su gusto y conforme a la generosidad de su tiempo.
Esto que digo nada tiene que ver con las miradas del reloj, pero me lo ha recordado.

En cuanto a las "ambiciones trepas" de nuestro vicario Gustavo..., confío en que tanto Gustavo como Pedro sólo quieren parecerse a Jesús y ser un sacerdote "conforme a su corazón", como dice un profeta por ahí.
Pero hay que reconocer que de todo hay en la viña del Señor, y algunos curillas jóvenes, nada más que abren la boca, delatan sus ansias de ser secretarios de no sé quién, profesores en no sé dónde o aspirantes serios al episcopado. ¡Lástima de vocación!

Gustavo Adolfo Conde Flores dijo...

Amiga Conchi:
Tu comentario adolece de contradicciones respecto a tu opinión pasada sobre la Sda.Liturgia.
El Señor instituyó el sacrificio de la Eucaristía, memorial de su amor, con las palabras "Tomad y comed...tomar y bebed...".Lo demás, las lecturas... ciertamente son de institución humana. Pero si creemos realmente que el Espíritu santo es el alma de la Iglesia, como recordó el Vaticano II, entonces se ha de ver el desarrollo litúrgico como un latido del Divino Espíritu en cada momento dado para así poder hacer vivir el Misterio de nuestra fe, la Eucarístía y los demás sacramentos instituídos por Jesús.
El movimiento litúrgico preconciliar deseaba hacer posible una participación más activa en la Liturgia, saboreando más y mejor lo elementos que lo integran. Vuestra Congregación fue fundada por el Beato Alberione para que colaboréis en el mejor conocimiento y vivencia de la Liturgia. Aquí tienes un filón que hay que trabajar en la parroquia.
Estoy de acuerdo que la Liturgia ha de vivirse sin mirar el tiempo. Los sacerdotes, al mirar al reloj en algun momento de la celebración, no es por aburrimiento, o porque tengamos otras cosas mejores que hacer...sino porque deseamos celebrar lo mejor posible...ars celebrandi, ¿te suena?. Asi sabemos que plegaria usar....
afectuosamente
Gustavo-Adolfo

Conchi pddm dijo...

Hola, de nuevo.
A tu comentario anterior (n. 6) no voy a responder. No tengo nada más que añadir.

Respecto a éste, tampoco tengo nada más que decir. Creo que al buen entendedor, pocas palabras bastan y al que no quiere entender, todas le sobran.

Saludos matutinos