Me acabo de enterar por la prensa que el famoso juez Baltasar Garzón quiere investigar sobre los crímenes en la zona nacional y en los primeros años del franquismo. Nada que objetar siempre y cuando se hagan para todos los crímenes que desde la proclamación golpista de la II República hasta 1939 se hicieron, también en la zona mal llamada republicana: desde la quema de los conventos y el patrimonio eclesiástico, los mártires que ocasionó el intento de golpe izquierdista de 1934, las víctimas de las checas del bando rojo y de la mayor persecución religiosa que ha habido en la historia de la Iglesia. Por cierto, aún queda un testigo de excepción y, según las últimas inestigaciones en los archivos de la KGB, más que testigo, pues documentos por él firmados le señalan como responsable de la matanza de Paracuellos del Jarama. ¿Se atreverá el llamado juez estrella a inculpar a ese fumador empedernido que pasea su cuerpo por los canales afines al gobierno actual?. No creo. Si hubiera sido Pinochet, o Franco...
Dejad a los muertos enterrad a sus muertos.
El gran acierto de la transición española fue el mirar hacia adelante, no revolver las miserias de nuestro pasado más reciente y facilitar que se cicatrizaran las heridas . Pero si se levantan los apósitos de las heridas del pasado, han de levantarse todas, sin excepción.
Desde luego si este juez quiere notoriedad, lo consigue.
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